Después de digitalizar el comercio, modernizar el matadero y mejorar el polígono industrial, el municipio espera concluir el centro cívico, encaminar una sala de eventos, dotar de restaurante a sus piscinas y dar otra vida a la madera.
El último mes del año servirá en Vinuesa para coger impulso hacia un 2026 marcado por la ejecución y la culminación de grandes proyectos. Con un presupuesto que rondará los 1,8 millones de euros, similar al del ejercicio actual, el Ayuntamiento visontino espera concluir meses de "exigente" trabajo y "poner al servicio de los vecinos" servicios e infraestructuras que "mejorarán la vida de todos". El alcalde, Juan Ramón Soria, repasa con Soria Noticias la actualidad municipal, reconociendo que el volumen de iniciativas ha condicionado el día a día del Consistorio y ha elevado el nivel de exigencia a "cotas nunca vistas".
"Megainversiones" como la destinada a la dinamización del comercio rural (medio millón de euros), las actuaciones en el matadero con cargo al Plan Soria (307.000 euros), o la mejora del polígono industrial (800.000 euros) han supuesto un desafío logístico y administrativo. "Hemos pasado de un presupuesto de 1.300.000 euros a ejecutar casi 3.000.000", explica Soria.
Uno de los proyectos más esperados y que encara su recta final es el centro cívico. Con una inversión de 283.000 euros, esta infraestructura está llamada a convertirse en el nuevo corazón social de la localidad. El edificio, de dos plantas y más de 150 metros cuadrados por cada una, albergará en su parte baja un bar y una zona de reuniones, mientras que el piso superior será un espacio diáfano con una pequeña cocina.
El objetivo es crear un lugar polivalente para acoger "cualquier tipo de actividades socioculturales o taller formativo", apunta el primer edil. La estructura del edificio, que contará con ascensor y plena accesibilidad, debería estar finalizada en la primavera de 2026, aunque su apertura al público requerirá una segunda inversión para el mobiliario.
Junto a este, el Consistorio visontino planea algo mucho más ambicioso. Y es que Juan Ramón Soria considera que el Ayuntamiento debe "ayudar o acompañar a quienes fomentan el dinamismo de un pueblo", y "darles espacios a estas iniciativas ciudadanas es esencial". Por ello, se ha solicitado, junto a la Diputación Provincial, una importante subvención que, de concederse, estaría al caer. Con ella, Vinuesa aspira a construir una gran sala de eventos anexa al centro cívico.
Se trataría de un espacio diáfano de entre 300 y 400 metros cuadrados, sin barreras arquitectónicas y diseñado para acoger conciertos, representaciones teatrales o grandes celebraciones. Soria ha justificado la necesidad de esta infraestructura porque "no hay una opción privada que tenga unas instalaciones para albergar más de 100 personas. Así es complicado celebrar en el pueblo una boda o una comunión". Este proyecto busca dar respuesta a una demanda histórica y dotar a Vinuesa de un espacio versátil para grandes aforos.
Otra de las actuaciones destacadas de los próximos presupuestos será la reforma de parte de las piscinas municipales, financiada con los fondos de cohesión territorial. El proyecto contempla la construcción de una instalación de unos 150 metros cuadrados con cocina y zona de bar, que "sustituirá al antiguo chiringuito y permitirá ampliar su uso más allá de los meses de verano", explica el regidor.
La inversión, que suma 90.000 euros entre dos anualidades, se enfrenta a un calendario ajustado. "Tendremos que licitar, adjudicar y ejecutar antes de julio, lo cual no va a ser nada fácil", ha admitido Soria.
Paralelamente, los Planes Provinciales se centrarán en obras de menor visibilidad, pero de gran importancia para los vecinos. Entre ellas, se incluyen la renovación de tuberías en varias calles o la adecuación de infraestructuras para cumplir con los requerimientos de la Confederación Hidrográfica del Duero.
Como un deseo para el próximo año, Juan Ramón Soria pide que el Gobierno de España ofrezca una solución a la falta de potencia eléctrica que afecta no solo a Vinuesa, sino a la mayor parte de la provincia de Soria. "La línea Burgos-Soria tiene 0 megavatios disponibles y esto condiciona el desarrollo de todos nuestros pueblos", lamenta.
Con un polígono prácticamente a estrenar, Vinuesa "no puede dar cabida a un nuevo aserradero que necesita 1.500 kilovatios, con lo que ya no podemos ni soñar con proyectos de grandes dimensiones", añade.
El objetivo con este proyecto era seguir la línea abierta por 'Vinuesa en tu mesa' y conseguir transformar en el territorio la madera que se extrae de los montes para generar un mayor valor añadido y, sobre todo, empleo. "Cuanto más manufactures ese producto primario, cuanto más manufactures la carne, más valor va a tener. Cuanto más manufacture la madera, más valor va a tener. Y en mi camino, más personas se van a ver beneficiadas de ello", detalla Soria. Este enfoque busca crear un tejido económico diversificado que no dependa exclusivamente del turismo y que ofrezca oportunidades laborales estables a los vecinos, como los 15 puestos de trabajo que podría generar ese pequeño aserradero. No obstante, esto deberá seguir esperando y confiando en que el Ejecutivo central escuche al mundo rural.
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