Peligran las inversiones en Soria si el MITECO no reserva potencia industrial antes de 2030

La patronal soriana no quiere que la provincia se resigne a ver pasar los kilovatios que producen sus molinos y placas solares hacia otros territorios sin dejar un solo empleo fabril en la tierra. La Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas (FOES) ha registrado este jueves sus alegaciones a la Propuesta de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2025-2030 del Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO), exigiendo que el innegable liderazgo de Soria en generación renovable se traduzca, de una vez por todas, en capacidad real para atraer industria.

Desde la organización empresarial se ha lanzado un mensaje de urgencia, toda vez que la planificación que ahora se cierra marcará el devenir económico de la próxima década. Según ha explicado la directora general de FOES, María Ángeles Fernández, las inversiones que no logren entrar en este documento marco quedarán postergadas, en el mejor de los casos, más allá de 2031. La preocupación en el seno de la patronal es palpable ante una realidad que califican de paradójica: Soria genera cinco veces más energía de la que consume, pero apenas dispone de un exiguo siete por ciento de capacidad eléctrica libre para nuevos suministros.

Esta carencia técnica ya está teniendo consecuencias tangibles en la economía provincial. Fernández ha lamentado que, en los últimos tiempos, diversos proyectos empresariales, tanto de firmas locales que buscaban crecer como de compañías foráneas interesadas en asentarse, no han podido ejecutarse precisamente por esa falta de capacidad en la red. La provincia corre el riesgo de consolidarse como un mero territorio de evacuación, un solar donde se extrae el recurso energético para enviarlo a los grandes polos de consumo como Madrid o el País Vasco, perpetuando así la asimetría histórica que lastra el desarrollo soriano.

El documento de alegaciones, firmado por el presidente Santiago Aparicio, solicita formalmente que se reconozca a Soria como territorio de interés estratégico para una transición energética justa. Los empresarios argumentan que en la provincia concurren dos factores determinantes: la condición excedentaria en producción verde y una desventaja demográfica grave y permanente, con una densidad de apenas 8,8 habitantes por kilómetro cuadrado. FOES mira hacia el norte de Europa, donde territorios con características similares han utilizado la política energética como palanca de cohesión, financiando infraestructuras con fondos estatales y europeos para crear polos industriales electrointensivos.

En el plano puramente técnico, las demandas de FOES descienden al detalle de la infraestructura necesaria para revertir esta situación. Solicitan al Ministerio que reserve una capacidad específica para consumos industriales en nudos estratégicos como Coscurita y Soria capital, identificando polígonos clave como Valcorba, el PEMA en Garray, o las áreas industriales de Ólvega, Ágreda y Almazán. La patronal considera vital que la planificación no se centre exclusivamente en evacuar renovables, sino que habilite la llegada de fábricas que requieren gran potencia eléctrica.

Entre las infraestructuras concretas que reclaman los empresarios figura la instalación de un transformador adicional en la saturada subestación de Coscurita y la reserva de posiciones en Vientos de Soria y Zuzones. Asimismo, ponen el foco en la comarca de Pinares, una zona que actualmente depende de una línea rural de 13 kV insuficiente para cualquier uso industrial serio, solicitando una nueva subestación en el entorno de Cabrejas del Pinar o Venta Nueva. También se pide reforzar el corredor que une San Leonardo de Yagüe con El Burgo de Osma y San Esteban de Gormaz.

Las alegaciones presentadas no olvidan tampoco las infraestructuras de transporte, solicitando que se incluya explícitamente la electrificación del eje ferroviario Torralba-Soria-Castejón como proyecto sinérgico. FOES propone además una reserva anticipada de entre 250 y 300 megavatios destinada a futuros polos industriales, buscando que la energía generada en los campos sorianos sirva, en primer lugar, para iluminar el futuro económico de la propia provincia.