Patrimonio da luz verde a obras junto a la iglesia de San Millán en Oncala
Una imagen de Oncala. /GM
La Comisión Territorial da el visto bueno al proyecto municipal que interviene en cuatro vías públicas de la localidad de Tierras Altas. La resolución exige medidas específicas de drenaje para proteger el templo de las humedades y garantizar su conservación.
La Comisión Territorial de Patrimonio Cultural ha autorizado el proyecto de sustitución de redes y pavimentación promovido por el Ayuntamiento de Oncala. La intervención urbanística actuará sobre las calles Ermita, Obispo y Callejón, además de la calle Capillo.
Esta última vía reviste una especial importancia por encontrarse dentro del entorno de protección de la iglesia de San Millán, un templo declarado Bien de Interés Cultural (BIC). Por este motivo, los técnicos han establecido condiciones estrictas para asegurar que la obra civil no afecte a la integridad del monumento.
Actuaciones en el entorno del BIC
Las obras en la calle Capillo contemplan el acondicionamiento del terreno y la construcción de un muro de contención de mampostería. Según recoge el expediente, la pavimentación se ejecutará utilizando hormigón y piedra natural, respetando el diseño preexistente para mantener la armonía visual del conjunto histórico.
El proyecto incluye también la instalación de un nuevo hidrante para la red de incendios. En este sentido, Patrimonio ha indicado que el Consistorio deberá actualizar su Plan de Emergencias para incorporar la operatividad de este punto de agua, situado al norte de la iglesia, una vez se compruebe su correcto funcionamiento.
Control arqueológico y protección contra la humedad
La autorización administrativa queda supeditada a la realización de un control arqueológico durante los movimientos de tierra, dado que se trata de una zona susceptible de albergar restos históricos bajo la cota cero. El promotor deberá presentar el proyecto de intervención arqueológica pertinente antes del inicio de los trabajos.
Asimismo, la Comisión ha puesto el foco en la salud estructural del templo. Para reducir los problemas de humedad detectados en la iglesia y favorecer la transpiración, se exige mantener una franja de separación de 50 centímetros entre las nuevas soleras y el muro del edificio. Este espacio deberá rellenarse con grava para facilitar el drenaje.
Únete al universo Soria Noticias Descárgate nuestra APP, entra en nuestro canal de WhatsApp o síguenos en redes.