319 propietarios de Bocigas de Perales logran el aval ambiental para reordenar 800 hectáreas

La Junta de Castilla y León publica hoy el informe favorable que permite avanzar en la reestructuración de la propiedad en esta pedanía de Langa de Duero. El proyecto, impulsado por los propios vecinos, busca transformar más de mil fincas dispersas en explotaciones viables respetando el patrimonio arqueológico y natural del entorno.

El Boletín Oficial de Castilla y León ha hecho pública esta mañana la resolución de la Delegación Territorial de Soria por la que se dicta el informe de impacto ambiental favorable para el proyecto de concentración parcelaria de Bocigas de Perales II. Se trata de un paso administrativo fundamental para esta iniciativa, que destaca por ser de carácter privado, promovida directamente por la Asociación Concentración Parcelaria de la localidad, perteneciente al municipio de Langa de Duero. La administración regional considera que la actuación no tendrá efectos significativos sobre el medio ambiente, siempre que se cumplan las medidas preventivas estipuladas, dando así vía libre a una reordenación muy esperada por los agricultores de la zona.

El proyecto abarca una superficie aproximada de 804 hectáreas, excluyendo aquellas zonas que ya fueron objeto de una concentración anterior finalizada en 1975, así como el casco urbano y los montes de utilidad pública. La intervención afecta a 319 propietarios que actualmente ven sus tierras fragmentadas en 1.014 parcelas, con una superficie media de apenas 0,79 hectáreas, lo que dificulta enormemente la rentabilidad de las explotaciones. Tras el proceso de reestructuración, se espera constituir unas 450 fincas de reemplazo, elevando la superficie media a 1,78 hectáreas y reduciendo la dispersión a 1,41 parcelas por propietario, lo que permitirá optimizar los trabajos agrícolas y los costes de producción en esta zona de la Ribera.

Para vertebrar esta nueva estructura de la propiedad, se contempla una importante mejora en la red viaria rural. El plan prevé la adecuación de más de cuatro kilómetros de caminos existentes y la apertura de 8.799 metros de nuevos viales, dotando a la zona de una red de 13 kilómetros que facilitará el acceso a las nuevas fincas. Estos caminos, que serán de tierra, tendrán una anchura de dominio público de diez metros en las zonas de cultivo. Es importante destacar que no se contemplan nuevas infraestructuras de regadío ni grandes movimientos de tierras más allá de los necesarios para la red viaria, manteniéndose el uso mayoritario de cultivo de secano, viñedo y monte bajo que caracteriza el paisaje de Bocigas.

El informe ambiental pone un acento especial en la protección del patrimonio cultural, habida cuenta de la riqueza arqueológica del término. La resolución identifica numerosos yacimientos dentro del perímetro, como 'El Guijarral', 'Pico del Cuerno' o 'Las Tenadas', estableciendo medidas de balizado y control arqueológico estricto durante los movimientos de tierra. Asimismo, desde el punto de vista natural, se establecen salvaguardas para el río Perales y sus arroyos tributarios, así como para el Monte de Utilidad Pública 'Valdelacueva de Bocigas', asegurando que la modernización agraria sea compatible con la conservación de los sotos, las vías pecuarias y los hábitats de interés comunitario presentes en la zona.