El Ayuntamiento de Soria y el Colegio de Veterinarios renuevan su colaboración con un convenio de 23.000 euros para gestionar la población felina. El programa busca ahora expandirse a los barrios rurales.
El Ayuntamiento de Soria ha reafirmado esta mañana su compromiso con la gestión ética de la fauna urbana mediante la presentación de un nuevo marco de actuación para el control de las colonias felinas. La concejala Ana Alegre ha sido la encargada de desgranar los detalles de un convenio que se firmará en los próximos días con el Colegio de Veterinarios, dotado con una partida de 23.000 euros, y que busca dar continuidad a un modelo que ya se ha convertido en referencia de éxito. A esta inversión directa se sumará la licitación de un pliego específico para el control de palomas y gatos, con una vigencia de dos años y un presupuesto de 18.000 euros para cada una de las partes, lo que refuerza la estructura administrativa y económica del proyecto.
La iniciativa se sustenta sobre el método CER (Captura, Esterilización y Retorno), una estrategia que ha permitido a la capital soriana alcanzar cotas de control muy elevadas en el entorno urbano y que ahora pone su mirada en los barrios rurales. Según se ha detallado durante la comparecencia, el reto inmediato pasa por extender esta gestión integral a núcleos como Oteruelos y Pedrajas, donde las dinámicas de las poblaciones felinas exigen un abordaje adaptado a su entorno. Para ello, la colaboración entre la administración local, los servicios veterinarios y el tejido voluntario, representado por la Asociación Almas Gatunas, resulta una pieza angular del engranaje.
José María Vallejo, representante del Colegio de Veterinarios, ha aportado la visión técnica de un programa que destaca por su rigurosidad en la trazabilidad. El sistema se apoya en una base de datos específica denominada Colfeso (Colonias Felinas de Soria), una herramienta que permanece conectada con los registros oficiales de identificación y que permite monitorizar cada paso del proceso. Gracias a esta tecnología, es posible saber qué voluntaria realizó la captura, a qué clínica fue trasladado el animal, qué intervenciones clínicas se le practicaron y quién se encargó de su retorno, registrando asimismo cualquier incidencia sanitaria que pudiera surgir en el camino.
Las cifras avalan la eficacia de este modelo de gestión que lleva implantándose desde 2019. En lo que va de año 2025 se han ejecutado 74 actuaciones en la capital, sumando un total de 128 identificaciones completas desde 2024. En términos históricos, el registro acumula datos de esterilización y desparasitación de cerca de 589 felinos, situando a Soria en una ratio muy positiva respecto a otras capitales de provincia. Actualmente, se trabaja sobre un mapa que oscila entre las 21 y 24 colonias, de las cuales 17 se encuentran ya en torno al 90 % de control sanitario y poblacional, un porcentaje que garantiza la estabilidad de los grupos y minimiza las molestias vecinales.
Más allá de las cifras y los presupuestos, el factor humano se revela como el motor insustituible del proyecto. Jennifer Gómez, voluntaria de la Asociación Almas Gatunas, ha querido visibilizar que el cuidado de estas colonias es una labor compleja que exige una dedicación constante y un notable esfuerzo personal. Gómez ha explicado que la vigilancia sobre el estado de salud de los animales es permanente, actuando de inmediato ante cualquier signo de enfermedad para trasladar al ejemplar a los servicios veterinarios. Sin embargo, ha lamentado que todavía persisten comportamientos incívicos, como la retirada de comederos o la falta de identificación de los animales domésticos, que dificultan el trabajo de campo.
En esta línea, el presidente del Colegio de Veterinarios, Rafael Laguens, ha contextualizado el programa dentro de una evolución social más amplia, recordando que la ciudadanía considera hoy a los animales de compañía como un miembro más de la familia. Laguens ha destacado que la nueva legislación de protección animal ha venido a hacer obligatorias unas prácticas que el Ayuntamiento de Soria ya aplicaba de forma pionera años atrás. Asimismo, ha insistido en que la educación, la identificación con microchip y la esterilización son los tres pilares básicos para evitar el abandono y garantizar tanto la salud pública como el bienestar animal, evitando así la reactivación de colonias ya controladas.
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