Ante la publicación del Real Decreto-ley 3/2012, la Central Sindical Independiente (CSI-F) expresa su frontal rechazo a la nueva reforma laboral del Gobierno central, que no va a servir para crear empleo, sino que va a desequilibrar las relaciones laborales en España, facilitando la destrucción de empleo y precarizando aún más las condiciones laborales y salariales de los trabajadores. Además, propicia el desmantelamiento del sector público.
CSI-F lamenta que el Gobierno quiera salir de la crisis con el único sacrificio de los trabajadores, que verán desaparecido ?en la práctica- el despido improcedente, al rebajar sus condiciones; cuando, por el contrario, se facilitan y se flexibilizan los motivos que permitirán el despido objetivo.
También se hace más fácil la aplicación de las regulaciones de empleo, es decir, el ERE, que ya no requiere el visto bueno preceptico de la autoridad laboral, algo imprescindible hasta ahora. El empresario podrá imponer unilateralmente sus condiciones, entre ellas la modificación de la jornada laboral, y los trabajadores sólo podrán defenderse recurriendo a nivel judicial.
Se da prioridad al convenio de empresa, frente al convenio colectivo, lo que debilita la posición del trabajador; y convierten las empresas de trabajo temporal en agencias de colocación, desviando competencias del INEM, ante la incapacidad de los políticos de dar a las oficinas de empleo la operatividad que requiere la situación.
CSI-F se muestra preocupado por la actitud de la reforma laboral ante el empleo público, porque propicia su desmantelamiento y, más concretamente, el despido entre el personal laboral de la administración.
El sindicato independiente asegura que la nueva laboral no entra a valorar si son necesarios o no los empleos públicos que se pretendan suprimir. Simplemente, el Estado, las Comunidades Autónomas y los Ayuntamientos podrán despedir al personal laboral que accedió a su plaza mediante oposición, argumentando causas técnicas, organizativas y de producción, igual que en la empresa privada. Con el agravante de que serán los empleados públicos los que paguen las consecuencias del despilfarro de la mala gestión de los políticos.
Por eso, dada la delicada situación en la que se encuentra en este momento el empleado público, CSI-F Soria celebra por segundo año consecutivo el Día del Empleado Público y de la defensa de lo público, para sensibilizar a las administraciones y la ciudadanía ?de la gravedad y de la trascendencia de la agresión que está sufriendo el empleado público, que repercutirá en la atención de los servicios públicos, tanto los de administración general, como los de sectores especialmente sensibles, como son el sanitario o el de educación?.
Así lo considera la presidenta de CSI-F Soria, Reyes Martínez, que afirma que ?la irresponsabilidad de los políticos, por su despilfarradora y mala gestión, está terminando con la ilusión, la dignidad, el trabajo y los salarios de los empleados públicos, algo injusto para las personas y las familias afectadas, pero también peligroso para el funcionamiento de la administración y de los servicios básicos del ciudadano?.
En el caso de la administración autonómica, a los problemas generales, se suma la futura aplicación de una ley que incrementa la jornada laboral semanal de 35 a 37,5 horas, que lejos de resolver los problemas financieros de la Junta, va a generar a corto y medio plazo la supresión de puestos de trabajo, unos 400 en la provincia de Soria, y va a deteriorar los servicios públicos, explica Reyes Martínez.
La presidenta del sindicato independiente en Soria recuerda que CSI-F ha exigido a la Junta que se puedan negociar los calendarios laborales en los diferentes sectores (Sanidad Educación, Administración General y Personal Laboral), puesto que el trabajo que desarrollan tiene características distintas. Asimismo, CSI-F reclama el solapamiento de los turnos, la convocatoria de concursos de mérito y traslado (suspendidos hace tiempo), el pago de la totalidad del salario en caso de enfermedad (que la Junta quiere reducir al 75%), o la vuelta a las 35 horas cuando el PIB de Castilla y León recupere de nuevo un crecimiento del 2,5%.
La celebración del Día del Funcionario, por parte de CSI-F, coincide con la convocatoria de las elecciones sindicales en el ámbito sanitario y de la administración autonómica en la Junta de Castilla y León, que ?ante toda esta coyuntura política y económica, especialmente agresiva para el empleado público, es una oportunidad necesaria para defender al empleado público. Y nosotros, desde CSI-F, vamos a seguir defendiendo al empleado público, porque estamos convencidos de que no es el responsable de la crisis económica y de la mala gestión de los políticos?.