El parte de incidencias de este Lavalenguas se ha cerrado con la atención de cincuenta personas por parte de efectivos de la Cruz Roja de Soria, si bien reseñaron al término de la tarde de este sábado 8 de junio que no se han registrado lesiones de mayor importancia.
De ellos, cuatro han sido enviados al Complejo Hospitalario de Soria por traumatismos, siendo uno de ellos, una luxación de hombro, el de mayor gravedad, y que ha sido causado por el contacto con alguno de los doce novillos que han sido soltados en Cañada Honda, en el monte Valonsadero.
El resto, además de erosiones y otro tipo de dolencias, no han requerido mayores cuidados, siendo los servicios de la entidad quienes han resuelto sin mayores problemas las contigencias que han ido surgiendo surgiendo desde el encierro de la mañana.
En cuanto a la ingesta de alcohol, reseñaron que se han dado dos casos con dos intoxicaciones leves que no han necesitado atención especializada.
Miles de sorianos han tomado parte en este primer contacto con los novillos que protagonizarán La Compra y La Saca en las fiestas de San Juan en un día gris y algo fresco, la lluvia hizo acto de presencia pero al final de la jornada sin afectar en modo alguna al festejo. Los novillos, de la ganadería toledana de Laura Velasco han protagonizado algún susto sin mayores consecuencias en una jornada limpia en lo que se refiere a la puesta en escena de su bravura y de su casta.
Por la mañana, a las 8:30 entraban los caballistas para comenzar el encierro de los novillos. Tiempo antes, cientos de sorianos y sanjuaneros estaban ya disfrutando de la música de las dulzainas con pastas y licores. En sólo quince minutos, los novillos de la ganadería toledana de Laura Velasco entraron a los corrales, ante el asombro, como ya sucediera el año pasado, de los asistentes, no hubo más intentos, los novillos bien hermanados, ya esperan en los corrales de Cañanada Honda para su posterior suelta en la tarde del Lavalenguas.