Una vez conocido el resultado de la votación del Reglamento de la OCM única en la Comisión de Agricultura del Parlamento europea, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) considera inútil para los cultivadores de remolacha de la región el mantenimiento de las cuotas azucareras hasta 2020 tan y como están en estos momentos si no están unidas a un precio justo por cada uno de las toneladas de raíz que se entregue.
Esta organización recordó que a partir de la campaña 2014 y 2015 el valor de este producto se va a quedar en 26,29 euros por toneladas al retirarse las ayudas emanadas de la reforma de la Organización Común de Mercado del año 2006. Dicha cantidad, consideraron este jueves 24 de enero, ?hace absolutamente inviable el mantenimiento del sector de la remolacha en Castilla y León?.
Así mismo, admitieron que es de vital importancia el mantenimiento del sistema existente en la actualidad, estimando que en este proceso negociador, la continuidad de las cuotas debe ir ligada de una forma ?ineludible? a un precio digno para la remolacha ?pues en caso contrario sólo se están condenando a unos agricultores como los de Castilla y León, que continuamente están dando muestras de su profesionalidad al situar sus rendimientos por hectárea en los más altos de la Unión Europea, a producir a pérdidas?.
En un comunicado, pusieron de manifiesto que ?si precio y cuotas no van unidas se va a producir el desmantelamiento de un sector?, recordando que teniendo como base una Organización Común de Mercados propia, que había funcionado a la perfección durante más de 30 años y que se comenzó a derribar con la reforma aprobada en 2006, este hecho ha supuesto la pérdida de la mitad de la cuota nacional, que ahora mismo no llega a las 500.000 toneladas de azúcar frente a un consumo interior anual en crecimiento que se sitúa en los 1,3 millones de toneladas. Con ello, la caída de la superficie que la región dedicaba a este cultivo un 44% pasando de las 53.420 hectáreas de 2006 a las 27.798 de la campaña actual.
Así mismo, la pérdida de activos que se dedican a esta actividad en Castilla y León en casi un 44% al disminuir desde los 9.720 remolacheros de 2006 a los 5.453 que la han declarado en su PAC este año, el cierre de 7 azucareras en España y la pérdida de más 1.000 puestos de trabajo directos en la industria, entre otros aspectos.
De igual modo, reseñaron que ?es evidente que este es el momento para salvar un sector que parece agoniza por la continuada caída de su precio y que se ha visto agravada en los últimos años por el abandono de la Junta de Castilla y León?, culpando con ello por un lado al Ejecutivo regional por dejar de pagar los tres euros por tonelada de la ayuda, y por otro, a la falta de implicación de Azucarera Ebro ?pues no está siendo capaz de repercutir los beneficios que está teniendo con las ventas de azúcar en la renta de los cultivadores?.