El ministro Montoro ha informado de que las administraciones públicas cerraron el año 2011 con un déficit del 8,51% del PIB, 2,5 puntos por encima de lo previsto por el anterior Gobierno socialista. En concreto, el déficit del Estado alcanzó el 5,1% del PIB frente al 4,8% esperado inicialmente, mientras que la Seguridad Social registró un déficit del 0,2% frente al superávit previsto del 0,4% del PIB.
Las comunidades autónomas, por su parte, registraron un déficit conjunto del 2,94 por ciento frente al 1,3 por ciento previsto anteriormente. Sin embargo, las diferencias entre cada territorio fueron notables. Así, la comunidad con un mayor agujero fiscal fue Castilla-La Mancha, donde el déficit llegó al 7,3 por ciento del PIB, seguida de Extremadura (4,59 por ciento), Murcia (4,33 por ciento), Cataluña (4,04 por ciento), Baleares (cuatro por ciento), Cantabria (3,72 por ciento), Asturias (3,64 por ciento), Comunidad Valenciana (3,64 por ciento), Andalucía (3,22 por ciento) y Aragón (2,78 por ciento, informa Ical.
Castilla y León, con un desfase en sus cuentas del 2,35 por ciento, ocupa el undécima lugar, con peores resultados que País Vasco (2,16 por ciento), La Rioja (1,97 por ciento), Navarra (1,89 por ciento), Canarias (1,78 por ciento), Galicia (1,61 por ciento) y Madrid (1,13 por ciento), única comunidad que cumplió en 2011 los deberes impuestos por el Gobierno.