Enmarcada dentro de las actividades que lleva a cabo la Casa de Soria en Madrid, invitando a personas vinculadas con Soria para que cuenten sus experiencias dentro de sus áreas de actividad, ayer jueves día 14 tuvo lugar una conferencia titulada ?Montar una empresa en Soria, y que además funcione?.
Enmarcada dentro de las actividades que lleva a cabo la Casa de Soria en Madrid, invitando a personas vinculadas con Soria para que cuenten sus experiencias dentro de sus áreas de actividad, ayer jueves día 14 tuvo lugar una conferencia titulada ?Montar una empresa en Soria, y que además funcione?. La presentación del acto corrió a cargo del socio de la Casa e ingeniero de Telecomunicación José Antonio Alonso, natural de Serón de Nágima. Los ponentes fueron Rafael Alonso Utrilla, vecino de Monteagudo, y su socio empresarial Jorge Tapia Arriaga.
El joven emprendedor Rafael Alonso explicó que habiendo estudiado y vivido en Madrid, decidió enfocar sus actividades empresariales en la provincia de Soria. El caso resulta chocante ya que, por lo general, son los jóvenes sorianos los que emigran a regiones más industrializadas. Se trata, pues, de un caso que se podría calificar como de viaje inverso.
Un fenómeno que se está produciendo ahora en nuestros pueblos es el retorno de personas jubiladas procedentes de las grandes ciudades, a las cuales emigraron en sus años jóvenes. Sin embargo, este joven soriano ha decidido regresar a Soria al inicio de su trayectoria profesional, buscando oportunidades de negocio allí donde otros reniegan de cualquier posibilidad y no ven otra alternativa que la emigración. Sin duda, una actitud valiente.
Rafael Alonso comenzó su actividad laboral constituyendo, junto con su amigo de Monteagudo Fernando Jodra, la sociedad Georadar S.L., que se dedicaba a la investigación ?no destructiva? del subsuelo, localizando infraestructuras de servicios para que no fueran dañadas por las máquinas de apertura de zanjas o para planificar perforaciones horizontales guiadas. Cuando las inversiones en infraestructuras se redujeron, buscaron alternativas ampliando su línea de actividad a la energía solar fotovoltaica.
En la provincia de Soria han realizado múltiples instalaciones, tanto aisladas como de venta a red. Las instalaciones aisladas consisten en dar suministro de energía eléctrica a naves agrícolas, merenderos, casas de campo, naves ganaderas, ermitas, bodegas y, en general, a recintos situados allí donde la red de distribución no llega. En cuanto a sistemas fotovoltaicos de venta a red han realizado instalaciones importantes en Almazán, El Burgo de Osma, polígono de las Casas en Soria, Serón de Nágima, Maján, Valdeavellano y Hortezuela.
Ante la decisión gubernamental de reducir las primas a la energía fotovoltaica, y en previsión de una reducción de trabajo en ese sector, buscaron nuevas alternativas, para lo que constituyeron la compañía Foroled S.L., dedicada a la eficiencia energética en iluminación mediante la moderna tecnología LED. El objetivo final es conseguir una reducción importante en la factura eléctrica del alumbrado. Foroled posee dos centros de trabajo: una oficina en Boadilla del Monte (Madrid), donde están los servicios administrativos, el área comercial y los laboratorios de diseño de prototipos e I+D+i; y unas dependencias en Monteagudo de las Vicarías, utilizadas como campo de pruebas y donde, en breve, van a iniciar la fabricación y montaje de las diferentes luminarias de diseño propio.
De su trabajo por cuenta propia, en la provincia de Soria, Rafael Alonso valoró aspectos como la autonomía y la independencia laboral, la libertad de acción, la oportunidad de nuevas sinergias y la satisfacción de aficiones personales ajenas al trabajo y difíciles de realizar en la gran ciudad (radio-afición, fotografía, astronomía, aeromodelismo?).
En cuanto a las dificultades que se le han presentado, destacó la insuficiente masa de potenciales clientes por la escasa población, la lejanía de los centros de consumo, la escasez de empresas auxiliares de apoyo, así como la tendencia inercial hacia el continuismo y falta de mentalidad innovadora. También echó en falta una mayor ayuda por parte de las entidades financieras así como constató la realidad de un escaso apoyo institucional a los emprendedores por parte de los organismos locales, provinciales y autonómicos.