El PSOE denuncia la entrada en vigor de un modelo de reservas de caza sin consenso que no contenta a nadie

La procuradora socialista Esther Pérez, coincidiendo con una nueva campaña de caza, insiste el paso atrás que supondrá el nuevo modelo de gestión de la Reserva de Caza y el desarrollo de las zonas rurales con la riqueza cinegética como motor económico. Este modelo se olvida de la participación de los propietarios, no gusta a los cazadores y elimina las ayudas ZIS que permitían a núcleos rurales invertir en mejoras en sus municipios.

El nuevo modelo vio la luz el pasado 31 de julio al publicarse el DECRETO 38/2013, de 25 de julio, por el que se modifica el Decreto 83/1998, de 30 de abril, por el que se desarrolla reglamentariamente el Ti?tulo IV «De los terrenos», de la Ley 4/1996, de 12 de julio, de Caza de Castilla y Leo?n.

Esther Pérez recalca que "con esta publicación se ha dado un paso definitivo a un nuevo modelo que no gusta ni a cazadores ni a ayuntamientos ni a propietarios. Se trata de un nuevo modelo que no ha tenido en cuenta las aportaciones de los implicados en la actividad de las reservas regionales de caza". La procuradora socialista tampoco entiende el empecinamiento de aprobar este cambio de forma unilateral y posteriormente hablar de entrada voluntaria de los municipios.

"Es un modelo aprobado de manera unilateral por la Junta de Castilla y León, que afirma que es voluntario cuando en realidad no lo es, que olvida los beneficios sociales y que prescinde de las ayudas ZIS. La finalidad y objetivo de su creación ,de las Reservas Regionales de caza fue promover, fomentar, conservar y proteger determinadas especies, subordinando a esta finalidad el aprovechamiento de su caza y esto es algo que vemos que no se va a cumplir".

El nuevo modelo de gestión de las reservas, explica la procuradora, se ha basado en la gestión directa, y prácticamente completa, por parte de la administración cinegética, teniendo los propietarios de los terrenos, pese a la existencia de las juntas consultivas, un escaso grado de participación en dicha gestión. "La actual situación económica es el único argumento para la desaparición de las ZIS, y sólo en este contexto la Junta se acuerda de los propietarios y se plantea darles una falsa participación con altas dosis de desinformación", añade.

Por otro lado, el modelo hasta ahora vigente implicaba que la totalidad de los gastos necesarios para el funcionamiento de las reservas se cargaban a los presupuestos de la Comunidad de Castilla y León, mientras que la totalidad de los ingresos generados se distribuían entre los propietarios de los terrenos que conforman las reservas. En contrapartida, una parte importante de las cacerías eran adjudicadas directamente por la administración cinegética mediante sorteo entre diferentes tipologías de cazadores.

En época de "vacas gordas" gestiona la junta y en momentos de dificultades recurre a la cogestión. "Entendemos que el nuevo modelo supone exclusivamente una deriva de responsabilidad a particulares propietarios de terrenos, al amparo de una supuesta mejor gestión del espacio y de sus recursos cinegéticos, y que no tendrá una más favorable repercusión económica en los mismos", ha declarado la procuradora.

"Pensamos que la verdadera pretensión que subyace en este decreto no es otra, que la de un mayor ahorro presupuestario para la Administración Regional, quien se reserva para si el control y gestión del Espacio, y que generará no pocos conflictos entre la población y propietarios de terrenos, en el reparto de unos mínimos fondos obtenidos con la adjudicación de la caza.", concluye.