El Concejal de Cultura del Ayuntamiento de Soria, Jesús Bárez, ha realizado este martes 30 de julio un balance muy positivo de la sexta edición del Festival Enclave de Agua, que se ha celebrado durante el fin de semana en el antiguo Lavadero de Lanas en el paseo de San Prudencio, y que ha congregado a numeroso público, atraído por la calidad del programa musical y las actividades complementarias, y a gran cantidad de turistas, sin que se produjesen incidentes relevantes ni ningún tipo de altercado ni médico ni de orden público.
El éxito, con asignaturas pendientes que seguir mejorando para crecer de la mano del propio evento, ha quedado ratificado con el lleno absoluto del ?blues train? desde Madrid, el completo colgado en los hoteles de la ciudad, el lleno también en la nueva zona de acampada y el salto de 900 a 1.700 usuarios del servicio de autocar urbano.
Por estos motivos, Jesús Bárez quiso agradecer el apoyo de los sorianos y su ?participación activa? en todos los conciertos y actividades de un festival que ha definido como ?el festival de la ciudad de Soria y de sus gentes? y al que ha augurado ?un largo y esperanzador futuro?. Además ha mostrado su satisfacción con la repercusión, en Soria y a nivel nacional, alcanzada en esta edición que ha sido ?más importante que en otras ocasiones? lo que garantiza ?un buen respaldo del público que cada día aprecia más este festival por la calidad de la música y el entorno natural en el que se realiza?.
El responsable municipal resaltó también que han recibido numerosas felicitaciones a través de la página web del Ayuntamiento y del propio evento, también de la mano de las redes sociales y llamadas de medios nacionales interesándose por la realización un año más del Enclave de Agua. Lo que a su juicio ratifica ?el fuerte tirón de esta actividad? y por ello el interés que en el Ayuntamiento tienen en mantenerlo en el futuro y seguir mejorando como se hace cada año desde que se pusiera en marcha hace seis años.
Para Bárez, el Festival se ha convertido en un evento ?de mucha calidad? para los sorianos y también en una ?inversión en turismo y para la hostelería en general que con este y otros actos está adquiriendo niveles de ocupación bastante notables?. En este sentido destacó que la ocupación hotelera durante el fin de semana ha sido completa al igual que la ocupación de la zona de acampada que se habilitó en la zona próxima al festival en la que pernoctaron 320 personas. También explicó que se acabaron las plazas del ?Blues Train?, un tren que desplazó desde Madrid a la ciudad a numerosos visitantes para participar en el Festival mientras escuchaban música de blues y de jazz.
El concejal significó que se duplicaron respecto a otros años las personas que decidieron acudir al Festival usando el transporte público. En total fueron 1.700 personas las que recurrieron el autobús urbano dispuesto por el Consistorio, casi el doble que en la edición del 2012, donde se contabilizaron a 940 usuarios, y 700 personas más que en 2011 cuando fueron 1.000 personas las que montaron a pesar de que el Festival tuvo un día más de duración.
Estos datos demuestran ?el nivel de atracción y el nivel cívico de la ciudad, ya que los ciudadanos prescinden de sus vehículos para llegar durante estos días al paseo de San Saturio a pie o en autobús?. Algo que coincide con el espíritu del Enclave de Agua en cuanto a su ?concienciación ecológica y de respeto a la naturaleza y no deteriorar el entorno?.
Bárez puso de manifiesto que ni la Policía Local ni Cruz Roja recibieron ninguna incidencia ni ningún altercado en los días en los que duraba el festival. Esta circunstancia se debe a dos causas, según ha asegurado, ?el relax del público familiar y la tranquilidad del entorno?. A su juicio, este festival no iba a un público específico sino a uno heterogéneo, un público familiar que actúa como ?colchón que amortigua posibles tensiones que pudieran producirse?.
En este sentido agradeció las labores de prevención, junto a Policía Local y Cruz Roja también estuvieron presentes los Bomberos del SEIS y servicio de vigilancia de la organización, que han evitado ?las causas que pudieran generar conflictos con la experiencia de ediciones anteriores?.
El concejal también ha querido felicitar a los trabajadores del almacén municipal por todos los trabajos previos de preparación de las instalaciones, como el vallado del recinto, la ampliación de la zona del escenario, las de la zona de acampada que a su juicio ?funcionaron a la perfección? y también a los de las empresas adjudicatarias de distintos servicios permitiendo con una gran labor de coordinación que todo estuviera a punto para el evento musical.
También ha extendido esta felicitación a los trabajadores de la empresa de jardines y la empresa de basuras por su ?excelente trabajo?. Para preservar el privilegiado entorno, se reforzó el servicio e implicó a todos los participantes de las zonas de restauración, acampada, bar y mercado. Los servicios de limpieza realizaron dos recogidas con una a primera hora y otra sobre las 13.00 horas y se reforzaron los contenedores habituales. Se instalaron 12 contenedores más para restos orgánicos y 2 para envases ?fueron suficientes para mantener limpio el entorno?. Estos se ubicaron en toda la zona de actuaciones y tres en la de acampada.
Desde el Ayuntamiento también han mostrado su gratitud con la empresa organizadora del festival por la programación musical de este año y por su eficacia al resolver en menos de 24 horas la caída del cartel de la cantante británica Alice Russel, que no pudo asistir al festival soriano tras anular toda su gira de conciertos de este verano por problemas familiares.
En cuanto al futuro, el concejal de Cultura ha comentado que se podría buscar otra área más adecuada para la zona de acampada, ya que este ha sido el único hecho sobre el que se han detectado aspectos mejorables, pese a la complejidad de encontrar alternativas en la zona. A pesar de que no se ha recibido ninguna reclamación formal ha destacado que se tratará de buscar algún espacio más confortable que también esté localizado próximo al río pero cuya ocupación no suponga un trastorno a la utilización de los espacios públicos de la ciudad. Se trata de atender a los visitantes y ofrecerles un lugar más agradable y cómodo y ?así darles razones para volver? pero con garantías de no deteriorar el entorno.