Que los diez toros entraran a la vez no quita que dieran algún susto a mas de un sanjuanero. Incluso en la roca donde dos amigos se encontraban disfrutando de la mañana del Lavalenguas, uno de los novillos intentó auparse a la roca quedándose a un escaso metro de los jóvenes. Al margen de la anécdota los caballistas lograron subir a la manada y diez de los doce toros entraron juntos en los corrales de Cañanada Honda. Los dos restantes entrarían después de forma separada. Fue un encierro rápido y limpio donde no hubo que lamentar daños.
Que los diez toros entraran a la vez no quita que dieran algún susto a mas de un sanjuanero. Incluso en la roca donde dos amigos se encontraban disfrutando de la mañana del Lavalenguas, uno de los novillos intentó auparse a la roca quedándose a un escaso metro de los jóvenes. Al margen de la anécdota los caballistas lograron subir a la manada y diez de los doce toros entraron juntos en los corrales de Cañanada Honda. Los dos restantes entrarían después de forma separada. Fue un encierro rápido y limpio donde no hubo que lamentar daños.