Estafan 300 euros y varias joyas a una mujer con el timo del tocomocho

Enseguida llegó otra señora que se ofreció para ayudar. En ese momento, la primera les mostró el billete de lotería que dijo que estaba premiado. La segunda mujer se ausentó del lugar, pero volvió rápidamente con un papel en el que constaba que dicho boleto estaba premiado con 300.000 euros.

La joven, con la escusa de no saber leer y no conocer Soria, les ofreció a la víctima y a la segunda mujer, que evidentemente era su colaboradora en el timo, 10.000 euros si le ayudaban a cobrar el premio. Pero les solicitó una cantidad importante de dinero o joyas como prueba de ?buena voluntad?.

En ese momento, la segunda mujer le entregó una cartera que dijo que contenía 3.000 euros. Entre las dos apremiaron a la víctima para que aportara una cantidad semejante. Sin embargo, sólo llevaba 200 euros, por lo que le acompañaron a un cajero automático de una entidad bancaria donde extrajo otros 100 euros.

Como esto no les parecía suficiente a las presuntas autoras, la denunciante las llevó a su propio domicilio donde les mostró y entregó unas joyas: tres anillos, unos pendientes y una cadena con colgante, todo ello de oro. La joven autora de los hechos metió el boleto de lotería y las joyas en una bolsa de plástico, dejándolo en el domicilio de la victima, mientras las tres salían a la calle con la intención de ir a la estación de autobuses a buscar el equipaje y la documentación de la primera de las mujeres. Al llegar a la altura de la calle Campo le dijeron a la víctima que las esperara allí puesto que enseguida volvían.

Tras pasar mucho tiempo sin que estas dieran señales de vida, la denunciante volvió a su domicilio, abrió la bolsa y comprobó que en su interior sólo había papeles de periódico y algunas monedas de céntimos de euro. Es cuando se dio cuenta del engaño. Las presuntas autoras de los hechos son dos mujeres de procedencia suramericana, y la primera de ellas más joven que la otra.

Este tipo de timos es bastante común, y requiere al menos dos personas para realizarlo, una la que ofrece el billete supuestamente premiado (de lotería, ONCE etc.) y otra, conocida en el argot como 'gancho', que aparece seguidamente en el lugar de los hechos, y que se compromete a verificar ese premio, consiguiendo así la confianza de la víctima, porque además esta segunda persona entregará cierta cantidad de dinero a la primera timadora.

La víctima, confiada por la situación, hará entrega del dinero requerido, para lo cual no dudará en dirigirse a entidades bancarias para extraerlo, o incluso les lleva a su propio domicilio. Cuando se da cuenta de los hechos ya es demasiado tarde.