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Frías Balsa: "El 60% del patrimonio de la provincia desapareció con la desamortización de Mendizábal"

Frías Balsa: "El 60% del patrimonio de la provincia desapareció con la desamortización de Mendizábal"

Actualizado 30/07/2013

El monasterio de Santa María de Guijosa, ya desaparecido, asentado en Espeja de San Marcelino, se fundó en el año 1401 por Pedro Fernández de Frías, que fue obispo de Osma, con el mecenazgo de los condes de Castrillo, que son los que vuelcan en Espeja todos sus haberes dinerarios para la iglesia, según explica el profesor Vicente Frías, que ha destacado el valor arquitectónico del edificio, con tres claustros y numerosas piezas artísticas de enorme valor.

Por ejemplo, en el siglo XVI, el famoso escultor francés Felipe de Vigarny realizó dos sepulcros en el monasterio, del que solo queda uno, que ahora se conserva en el Museo de Escultura de Valladolid. El otro, por cuestiones de herencias, está repartido entre los marqueses de Falces y Torreblanca.

Asimismo, en la segunda mitad del siglo XVI, el segundo conde de Castrillo, García de Avellaneda y Haga, patrocinó y costeó la elaboración y adquisición de importantes piezas y elementos artísticos. García de Avellaneda y Haga fue virrey de Nápoles, presidente del Consejo de Castilla y de Indias, y amigo de Palafox, continúa Frías Balsa.

Durante una primera desamortización de la francesada (1808-1814), el monasterio se salvó porque no abandonaron los monjes. Luego, en una segunda desamortización de 1820-23, se hicieron inventarios de todo lo que había en el monasterio. Pero en la desamortización de Mendizábal de 1835, el monasterio quedó totalmente abandonado, y los vecinos de los alrededores se llevaron todo. Sólo quedó en pie la iglesia hasta el año 1932 de pie, y luego se empezó a hundir, hasta desaparecer también, explica Vicente Frías a SORIANOTICIAS.com.

Actualmente, del monasterio (que fue calificado como ?El Escorial? de Soria) sólo queda un paredón, y algunas de las numerosas piezas artísticas están dispersas en las localidades de Espeja, Orillares, Guijosa o La Hinojosa; los cantorales se conservan en la catedral; la concatedral de San Pedro conserva alguna pieza; y de la documentación no ha quedado prácticamente nada. ?Una auténtica pena, que se haya perdido un patrimonio de tanto valor?, remarca Vicente Frías.

El profesor también destaca que trabajaron los mejores arquitectos del siglo XVII en España, puesto que también se hizo un palacio de verano con la traza de Gómez de Mora, uno de los mejores arquitectos de Felipe IV, que también hizo el palacio de Alcubilla de Avellaneda.

Frías Balsa indica que en el año 1944 ya se habla de que el monasterio está en ruinas. "Se destruyó en apenas 10 años. En Guijosa, medio pueblo se ha levantado a base de ruinas del monasterio, hasta unas rejas fantásticas de la iglesia se ven puestas en ventanas del pueblo", lamenta.

La desamortización de Mendizábal fue un proyecto bien pensado pero mal llevado a la práctica, según Frías Balsa. En Soria, mucha documentación no se recogió. Desaparecieron 80 cuadros, y la desamortización se llevó en la capital, por delante, el convento de los concepcionistas, el colegio de los jesuitas, el convento de Santa Clara, o el convento de San Agustín? Antes ya de la de desamortización de Mendizábal, la guerra de la francesada ya contribuyó al patrimonio soriano, ya que el general Durán hizo destruir las murallas de Soria.

Frías Balsa matizó que la destrucción de patrimonio también se repitió en las demás provincias. Por ejemplo, de los 62 conventos jerónimos que había en España, sólo se mantienen varios.

El profesor burgense tampo se olvida de la manera que tuvieron de llevarse la Universidad de Santa Catalina a lo que ahora es el instituto Antonio Machado de la capital soriana, en 1840. La mudanza se hizo en los meses septiembre-octubre, en carros de arrieros que tenían que estar en la vendimia. Se llevaron toda la biblioteca, que en parte fue quedando como un reguero en el camino, sin que nadie se preocupara por la pérdida de esos libros, dice Frías Balsa.

En la segunda jornada de los Cursos de la Universidad Santa Catalina, martes 30, la catedrática de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza, Carmen Morte García, disertó sobre los monasterios jerónimos y dominicos de la Corona de Aragón, dentro del primer monográfico en el que participó el lunes el profesor José Vicente Frías Balsa.

En el segundo monográfico de los Cursos de Santa Catalina, con el tema de la economía europea en el contexto internacional, intervino el profesor de la Universidad Pontificia de Salamanca, Luis Alberto Rivas Herrero, doctor en Economía y licenciado en Derecho, en el que se tratóel papel de Europa ante la dinámica económica internacional, o el contexto necesario para captar inversiones e impulsar el crecimiento,cuestiones muy actuales.

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