Los agricultores están pendientes de cómo resultará, finalmente, la cosecha de cereales. Por lo que parece, y a pesar de las buenas previsiones que existían en un principio, no será así ya que existe una producción desigual y no cumplirá con las expectativas generadas como informa ASAJA. La superficie total de cereales de invierno se mantiene estable respecto a campañas anteriores con 5,639 millones de hectáreas (un 1,3% de incremento). En cuanto a producciones, las previsiones de ASAJA arrojan una cifra de 13,9 millones de toneladas, de las cuales 5 millones corresponden a trigo blando, 0,8 millones corresponden a trigo duro, 6,8 millones a cebada y 1,3 millones a otros cereales. La cifra total de producción, de 13,9 millones de toneladas, supone una reducción aproximadamente del 15% en comparación con la media de los últimos cinco años, una merma que se debe fundamentalmente a las cuantiosas lluvias del mes de marzo que han impedido el normal desarrollo de las labores.
Los primeros datos de producción que llegan de Extremadura y Andalucía, donde ya han comenzado a trabajar las cosechadoras, están por debajo de lo esperado por los productores. Los cultivos en estas zonas se han visto gravemente afectados por las abundantes precipitaciones de marzo que han provocado, por un lado, la proliferación de enfermedades y malas hierbas y, por otro, y como consecuencia del anegamiento del terreno, la imposibilidad de realizar a tiempo los tratamientos con fungicidas y el abonado de primavera. Como consecuencia de todo ello, se prevé en estas zonas una cosecha corta, muy por debajo de las expectativas que inicialmente se podían tener.
Sin embargo en la zona norte de España las previsiones son más optimistas. La situación de las siembras en Castilla y León y Navarra son mejores, en general, aunque en las últimas semanas la ausencia de calor y la propagación de enfermedades ha rebajado algo las previsiones de los productores. La primavera lluviosa y la ausencia de calor además de provocar un retraso en la recolección de aproximadamente un mes, está causando una invasión de malas hierbas (bromo, etc.) que puede ocasionar destino para heno de una parte significativo de la superficie.
Por su parte, Aragón espera una cosecha media en cereales de invierno y proteaginosas y buenas perspectivas para los cereales de primavera, aunque el desarrollo del maíz también se está viendo afectado por la ausencia de calor. En otras zonas productoras como Castilla- La Mancha, Cataluña o Valencia los cultivos están en buenas condiciones aunque muy desiguales, lo que hace esperar una cosecha media tanto en trigos como en cebadas.
Hay que recordar que las necesidades de consumo en España ascienden a unos 28-30 millones de toneladas, de la cuales tan solo se producen en España 2/3 partes de las mismas, por lo que nos vemos obligados a importar el tercio restante y que, en el caso de este año, partimos al inicio de campaña de unos stocks históricamente bajos. Con todo ello, en relación a los precios, la sectorial de Cereales de ASAJA no ve motivos para el descenso que algunos agoreros atisban, máxime tras las graves inundaciones registradas en el último mes en el centro de Europa.