Una patrulla de la Guardia Civil del Seprona y otra de Seguridad Ciudadana de Almazán han denunciado ante la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León a cuatro cazadores como presuntos autores de varias infracciones a la Ley de Caza.
Los hechos denunciados fueron descubiertos a las 13:30 horas del pasado 5 de mayo, a la altura del kilómetro 186 de la N-111. Las citadas patrullas realizaban controles de actividades cinegéticas por lo que pararon e identificaron a los dos ocupantes de un vehículo, el de dos de los denunciados, que eran vecinos de Córdoba. En el maletero transportaban, en un saco de basura, cuatro cabezas de corzo macho, de las cuales tres no llevaban colocado correctamente el precinto en la cuerna. La cuarta cabeza no llevaba colocado ningún precinto. Dentro de la misma bolsa había un precinto sin usar.
Así mismo tampoco se encontraban marcadas las fechas del abatimiento de las piezas en los citados precintos. Mientras se realizaba esta inspección ocular se unieron al grupo otros dos cazadores en otro vehículo. Todos ellos presentan licencia de caza de Castilla y León, ni la autorización para cazar en el coto privado al que correspondían los precintos que portaban.
Debido a las dudas sobre quién de ellos había colocado el precinto a qué corzo, se ha denunciado ante la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Soria al conductor del vehículo por el ?transporte de partes identificables de piezas de caza sin acreditar su lícita procedencia?. No se acredita ya que los precintos son fácilmente extraíbles y reutilizables.
La ilegalidad de la actividad se debe a que se podría utilizar el mismo precinto una y otra vez y así podrían abatir un mayor número de especímenes en la misma temporada cinegética usando siempre el mismo precinto. El precinto es un documento que debe ser debidamente colocado y marcado en la cuerna de la res inmediatamente después de darle muerte y antes de su traslado. Tiene forma de brida y está compuesto por el propio precinto y una matriz.
También se ha denunciado a los cuatro cazadores de forma solidaria por ?no colocar un precinto de la forma reglamentaria en cuatro corzos? y por ?no marcar el precinto ni la matriz de cuatro precintos de caza mayor?.
Estos hechos vienen recogidos en la Ley 4/96 de caza de Castilla y León y en la Orden MAM/829/2011, de 13 de junio, por la que se establece el sistema de precintado de piezas de caza mayor para el control de la ejecución de los Planes Cinegéticos de los cotos Privados y federativos de Caza de Castilla y León.
Han sido decomisadas las cuatro cabezas de corzo macho así como los precintos y sus matrices para su entrega a los agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León de Almazán a disposición de la autoridad competente.