Así lo señala la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Foconauto), que ha situado el ratio medio de los vehículos usados sobre nuevo del 3 en Castilla y León. La mayor diferencia está en Salamanca con un ratio del 4,5, y la que menos Burgos con un 2,3. El número total de coches nuevos vendidos en la Comunidad, el pasado año, es de 27.721, frente a los 80.142 usados.
Para los concesionarios, la complicada situación económica es la causa de este comportamiento del mercado de la automoción. La compra de un coche usado se ha convertido en la primera opción, entre las familias, por resultar más económico. El precio ha sido un factor clave, por lo que el 38,7% de los coches usados vendidos tenían más de 10 años. El incremento de la venta de este tipo de vehículos resulta preocupante para Foconauto, ya que eso supone más inseguridad en el tráfico, por los problemas que pueda generar la antigüedad del parque automovilístico.