Los heridos de COPISO permanecen estables con una evolución 'esperanzadora' dentro de la gravedad
El joven M.M.V., de 25 años, es el que muestra las quemaduras y heridas menos graves. J.G.C., de 21 años , que tiene las quemaduras más severas, se mantiene estable, y la buena noticia es que parece que las heridas no afectan a órganos internos. Asimismo, A.C.P, el camionero de 61 años, está siendo hidratado y se está a la espera de que se concreten los posibles daños internos.
El presidente y gerente COPISO, Javier Blanco y Andrés García, han estado este viernes en Valladolid, acompañando a los familiares de los heridos, ?porque ahora, por encima de cualquier otras cosa, hay que pensar en los tres heridos y en sus familias?.
Mientras tanto, los diferentes departamentos de COPISO, con excepción de la fábrica de piensos, trataban este viernes de volver a la actividad normal, después del duro golpe recibido. Varios operarios han estado, durante toda la jornada, retirando las chapas y elementos de la nave de la fábrica alcanzados por la onda expansiva de la explosión, y que podían ser un peligro.
Lógicamente, la fábrica de pienso ha estado parada. Y así seguirá en tanto no se reparen los daños, y se conozcan con exactitud los motivos de la ignición, que podría haber tenido consecuencias más graves. Afortunadamente, en el momento de producirse la bola de fuego no había empleados en la zona, con excepción de los dos jóvenes de mantenimiento, y el camionero herido, que se encontraba cargando pienso.
De todos modos, las actuaciones en la fábrica han sido las mínimas, a la espera de que los peritos de los seguros hagan su valoración. También hay que conocer los informes técnicos que aclaren las causas de la ignición. Sí se puede decir que el silo no ha explotado, y que no es la causa de la llamarada generada. De hecho, el operario que trabajaba dentro del silo es el que ha resultado menos grave.
Según informa la Subdelegación del Gobieno, se afianza la teoría de que el polvo suspendido en la zona pudo ser el desencadenante de la bola de fuego, que se comportó como una mecha, tras producirse una primera combustión, provocada ?al parecer- por los trabajos de soldadura que se estaban llevando a cabo en el silo, que estaba vacío, ventilado, y en el que se había llevado a cabo el protocolo de seguridad y las mediciones oportunas de gases.
Las muestras de apoyo a los heridos y a la cooperativa han sido muy numerosas, con una sociedad soriana volcada con COPISO. Instituciones, organizaciones empresariales, empresas y socios han trasladado su apoyo, ofreciendo la ayuda que necesite la cooperativa para pasa pasar este mal trago. Una solidaridad que ha llegado también de numerosas empresas y cooperativas de Castilla y León y de España. Unos apoyos que los responsables y representantes de la cooperativa agradecen ?de corazón?.