Tras su reciente publicación en el BOE (Boletín Oficial del Estado), la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) denuncia que la subida de las tasas judiciales, cuya aplicación se retrasará unas semanas ante la falta de impresos, provocará que los agricultores y ganaderos esta región desistan de emprender acciones judiciales en caso de impago en la venta de sus cosechas o su ganado y beneficiará directamente a aquellas personas o empresas que dejen de pagar las mismas.
Con la espectacular alza de las tasas judiciales muchos agricultores y ganaderos se lo van a pensar mucho a la hora ir a los tribunales pues en algunos casos no les va a compensar. A juicio de UCCL se crea así una justicia de dos categorías, los que podrán y los que no podrán pagarla.
En los casos más comunes de impagos de cosechas se beneficia claramente a la empresa que rompa unilateralmente lo pactado entre ambas partes, ya que en muchos casos el agricultor desistirá de iniciar acciones legales para defender sus legítimos derechos por el coste elevado del proceso, que se une a la pérdida de los ingresos como consecuencia del impago.
También se podrá dar el caso de empresas que paguen la cosecha mediante pagaré u otra forma de pago similar y que el agricultor a la hora de ir a cobrar compruebe que no hay fondos. La reclamación judicial, en este caso, también va a suponer el pago de una tasa que si la cantidad de cosecha a cobrar es poca, no le va a compensar.