En la agrupación soriana aseguran que estos hechos deterioran los singulares valores ecológicos de estos ríos.
La agrupación ecologista soriana ASDEN ha puesto el foco este miércoles en el caudal "mínimo" que han mostrado los ríos Razón y Tera durante los meses de agosto y septiembre. La situación que han mostrado durante este tiempo estival muestra unos cauces "por debajo de sus requerimientos ecológicos, llegando a estar secos en algunos puntos".
Según han asegurado, la falta de lluvias de este verano ha sido una de las causas, a la que hay que sumar el incremento en las extracciones de agua, "como es el caso de la captación en la cabecera del Razón para El Royo, en buena parte para riego de jardines".
A ello añaden añadir los pozos ligados al nivel freático del río "y los sondeos que hacen disminuir el caudal de fuentes y manantiales", componentes todos ellos relacionados que forman parte del mismo ciclo del agua.
En este sentido han explicado que los ríos Razón y Razoncillo tienen varias categorías de protección tales como LIC (Lugar de Interés Comunitario), ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves), y Reserva Fluvial, tal y como aducen figura el Plan Hidrológico del Duero. "Además albergan a numerosas especies de fauna con elevado grado de protección", continúan, citando al visón europeo (en peligro de extinción) y el desmán del Pirineo (vulnerable, siendo la población del río Razón una de las mejor conservadas). "Estas características legales y naturales deberían conllevar y garantizar la dotación de un caudal ecológico proporcional", han apuntado.
Para ASDEN, Uno de los problemas para asegurar este caudal ecológico es la captación de El Royo, que tiene concedido un volumen de siete litros por segundo, lo cual supone una previsión de consumo de unos 1.500 litros por habitante y día, ya que el consumo considerado normal para uso doméstico es de 100 litros por vecino a diario. Un volumen que se extrae en mayor medida en verano, "que es cuando más hay más población y demanda, y también cuando más escaso es el caudal". Aún así, han insistido en que sigue dándose un exceso de consumo respecto al gasto medio de un hectólitro por habitante y día.
"Este exceso de caudal de abastecimiento estival procede de la demanda del riego de huertos, jardines y llenado de piscinas privadas. Garantizar este uso no prioritario, conlleva el deterioro del Razón y del Tera, y sus valores naturales protegidos" han significad.
Esta situación ha sido denunciada por ASDEN-Ecologistas en Acción de Soria, y también, según afirman, por ayuntamientos ribereños y por sociedades de pescadores en varias ocasiones en la década de 1990 y 2000, "sin que se hayan tomado decisiones por ninguna administración". Y es que para este colectivo, las "muchas captaciones y usos" de esa cuenca hidrográfica, deberían ser controlados con mayor rigor por la Confederación Hidrográfica, y también por los Ayuntamientos y la Diputación, "imponiendo precios progresivos al volumen de agua consumido, para limitar usos recreativos privados excesivos".
El no adoptar medidas está generando, para los ecologistas, "un coste de fondos y recursos públicos al resto de la sociedad", como consecuencia de retirar las truchas que permanecen en pequeñas pozas que se han estado secando; o el de "gastar en proyectos de conservación" del desmán del Pirineo. Algo que no sería necesario "si su hábitat no sufriera agresiones como es la desecación del mismo para regar jardines".
Para conseguir una solución, en ASDEN han explicado es conveniente en el futuro inmediato "abastecer al pueblo de El Royo con agua captada del Duero", al igual que ocurre con numerosas localidades de la provincia.