Porcentualmente, el aumento durante 2022 respecto al año pasado supera en dos puntos la media de crecimiento a nivel regional.
La provincia de Soria va recuperando las cifras prepandemia en lo que atañe a pernoctaciones de turismo rural, según los indicadores que ofrece la Encuenta de Ocupación en Alojamientos Turísticos Extrahoteleros publicada este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los establecimientos del sector regitstraron durante 2022 174.393 pernoctaciones a lo largo del pasado año, lo que se traduce en un aumento del 27,5%. En Castilla y León fueron constatadas 1.770.311 pernoctaciones, apenas 55.000 menos que las 1.825.064 de 2019, y que además suponen un crecimiento del 25,1 por ciento respecto a las de 2021, que fueron 1.414.876. Con estas cifras, la Comunidad continúa liderando los datos en turismo rural en España, también en lo relativo al número de viajeros, ya que se contabilizaron 743.605, aún por debajo de los 824.537 de 2019 pero un 32,5 por ciento por encima de los 561.414 de 2021.
Los datos oficiales sitúan en un 22,2 por ciento el crecimiento de pernoctaciones en alojamientos de turismo rural a nivel nacional en 2022, hasta contabilizar 11,95 millones, mientras que el número de viajeros, situado en 4,35, creció un 31,8 por ciento con respecto a 2021. De esta manera, Castilla y León acumula el 17,1 por ciento de los viajeros y el 14,8 por ciento de las pernoctaciones a nivel nacional, con Baleares situada a continuación con un 11,7 por ciento.
No obstante, en relación al mercado nacional de viajeros y pernoctaciones, Castilla y León agrupa uno de cada cinco viajeros, dado que los 687.884 registrados en los alojamientos de turismo rural en la Comunidad supusieron el 19,7 por ciento de los 3.492.956 viajeros residentes en España, y las 1.657.661 pernoctaciones registradas suponen el 18,5 por ciento de las 8.943.632 de viajeros nacionales.
La estancia media fue el único dato negativo para el posicionamiento de Castilla y León en turismo rural, ya que los 2,38 días se sitúan por debajo de los 2,53 notificados el año pasado, si bien la media nacional también se redujo de 2,89 a los 2,75 contabilizados en 2022.
Entre las 15 provincias con mayor número de pernoctaciones, se encuentran cinco de Castilla y León. Ávila ocupa así la sexta plaza con 330.791, lejos, no obstante, de Málaga, que lidera esta clasificación a nivel nacional con 653.989. Segovia, por su parte, registró 260.603 pernoctaciones, situándose en octavo lugar, y Burgos se colocó justo detrás con 246.374. Más alejadas se hallan León, en el puesto 12 con 224.404 pernoctaciones, y Salamanca, que registró 177.644 pernoctaciones, situándose en decimoquinta posición.
El número de establecimientos también continuó creciendo desde los 3.077 del 2021 a los 3.363 registrados en 2022, aún por debajo, no obstante, de los 3.545 de 2019, antes de la pandemia de COVID-19. El número de plazas estimadas se acerca a las 30.000, en concreto situándose en 29.956, con un grado de ocupación del 16,07 por ciento que se incrementa al 32,89 por ciento en fin de semana. En total, en Castilla y León se emplearon 4.747 trabajadores en el sector del turismo rural, la mayor cifra nacional y casi una quinta parte del total: 24.614 empleados en toda España. La ocupación media en el conjunto nacional fue del 20,44 por ciento, creciendo en los fines de semana hasta el 34,78 por ciento.
Por provincias
El número de pernoctaciones presentó crecimientos en todas las provincias salvo en una, León, al comparar los datos de 2022 con 2021. Las mayores subidas las registraron las provincias de Segovia, con un crecimiento del 73,4 por ciento (260.603 pernoctaciones) y Burgos, donde aumentaron un 47,8 por ciento (246.374).
Tras ellas se sitúan las subidas de Valladolid, del 30,5 por ciento (97.596); Palencia, con un 23,6 por ciento (109.411); Zamora, donde aumentaron las pernoctaciones un 22,1 por ciento (148.791); y Ávila, con un crecimiento del 21,4 por ciento (330.791). Más moderadas fue la subida de Salamanca, con un 3,4 por ciento hasta alcanzar las 177.644 pernoctaciones, mientras que en León descendieron un 3 por ciento hasta las 224.404.
Por lo que respecta a los viajeros, las mayores subidas las experimentaron Segovia, con un incremento del 68 por ciento hasta los 120.052 viajeros; Burgos, donde el crecimiento fue del 50,6 por ciento hasta los 107.175 viajeros; y Zamora, cuyos 67.232 viajeros supusieron un 40 por ciento más que los registrados en 2021.
Por debajo ya del 40 por ciento se sitúan Ávila, con un crecimiento del 37,9 por ciento (125.248 viajeros); Valladolid, que creció un 34 por ciento en número de viajeros (42.850); Palencia, donde el crecimiento fue del 29,7 por ciento (43.871); Salamanca, con una subida del 25 por ciento (78.005); y Soria, que creció un 23 por ciento hasta los 65.193 viajeros. La cara negativa la presentó León, única provincia donde disminuyó el número de viajeros un 4,8 por ciento hasta los 93.974 en 2022.
Fuente: Ical