En el partido animalista indican que a pesar de que el astado utilizado en 2022 falleció, el Juzgado no accedió a suspender cautelarmente el festejo el pasado noviembre, aunque sí admitió a trámite su recurso.
El Partido Animalista PACMA ha formalizado ya su demanda contra el festejo del Toro Jubilo, de Medinaceli, según han referido este miércoles. Un trámite en el que "la magistrada del Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Soria tendrá que valorar ahora los argumentos jurídicos" de la formación política, donde afirman que este festejo "carece de base legal para poder seguir celebrándose".
Entre los muchos argumentos plasmados en la demanda, la asesora jurídica del partido, Eva Ramos, destaca la modificación de la Ordenanza reguladora que aprobó el Ayuntamiento en 2015, tras la cual "el Consistorio no habría seguido el procedimiento legalmente establecido en el Reglamento taurino de Castilla y León". Por ello, este evento carecería desde entonces de su catalogación como 'espectáculo taurino tradicional'.
Una cuestión que también denunció el partido animalista sobre el Torneo del Toro de la Vega, cuya celebración continúa paralizada desde 2022 gracias a otro recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad.
Otro de los fundamentos de la demanda se basa en la muerte del animal utilizado en 2022. A criterio de PACMA, "si tal y como consta en la documentación veterinaria, el toro estaba en perfectas condiciones y, tal y como afirmó la Guardia Civil, no se había cometido ni una sola infracción de la normativa, lo que también sostuvo la delegada Territorial de la Junta, para archivar la denuncia interpuesta entonces por PACMA". algo que interpretan en el partido que lo que la normativa permite hacer a los toros, les puede causar la muerte. "Esto implicaría, a su vez, que la misma no se habría adaptado al Decreto de 2016 por el que el gobierno autonómico prohibió la muerte de los toros en público".
Reforzando sus argumentos, el partio ha presentado un informe del veterinario José Enrique Záldivar, presidente de AVATMA, en el que se analizan los vídeos con los que el partido documentó el festejo de 2022, desde un punto técnico veterinario. En la misma línea, el informe sostiene que el desarrollo del festejo permitido por la ordenanza, puede provocar la muerte de los animales. En palabras del veterinario “por su desarrollo, en el Toro Jubilo, se dan todas las circunstancias para que ocurra tal fatalidad”. Así, concluye que la muerte del novillo en 2022 “no debe ser considerada como algo anecdótico, casual o accidental, sino como algo que puede suceder cuando se lleva a un organismo vivo más allá del límite de lo soportable”.
PACMA confía en que la magistrada, tras estudiar detenidamente sus argumentos y pruebas, les dé la razón, "lo que comprometería seriamente que el espectáculo pudiera volver a celebrarse en el futuro", concluyen.
“Estos cruentos festejos deberían estar prohibidos desde hace tiempo, pero, la realidad es que, mientras no tengamos gobiernos verdaderamente comprometidos contra el maltrato animal, no nos queda otra que seguir dedicando mucho tiempo y recursos a acabar con ellos, uno a uno, ante los tribunales”, sentencia Cristina García, abogada y Vicepresidenta de PACMA.