La Junta concluye las obras de consolidación en la torre del castillo de Monteagudo

El delegado territorial de la Junta, Manuel López, ha asistido esta mañana a la recepción oficial de las obras de emergencia de apeos y consolidación de la torre del homenaje del castillo de Altamira, en Monteagudo de las Vicarías. La Consejería de Cultura y Turismo inició estas obras, adjudicadas a la empresa TRYCSA, Técnicas para la Restauración y Construcciones S.A., por un importe de 245.782,76 euros, en el pasado mes de noviembre.

Junto al delegado territorial han asistido a la recepción de las obras la alcaldesa de Monteagudo de las Vicarías, María Manuela Pinilla; el director de la obra, Fernando Cobos; el presidente de TRYSA, Vidal Sánchez, y el jefe del Servicio Territorial de Cultura y Turismo, Carlos de la Casa.

El castillo de Monteagudo de las Vicarías está constituido por un recinto de forma poligonal que preside una torre de planta pentagonal, asentado sobre un montículo natural situado en el extremo de la villa.

En los años 2004 y 2005 la Junta ya realizó diferentes intervenciones de emergencia de extraordinaria complejidad para sujetar la ladera del castillo, que se desplazaba hacia el valle arrastrando la estructura, y consolidar las estructuras de fábrica, gravemente dañadas por este movimiento. Entonces, se implementó un complejo sistema de control de la estructura que incluía unos cables de acero que zunchaban la torre. La Consejería de Cultura y Turismo invirtió en estas actuaciones 904.524 euros.

Durante el periodo comprendido entre aquella primera intervención y la ahora ejecutada se realizaron varias visitas de reconocimiento, que han permitido evaluar la evolución que ha seguido el conjunto a lo largo de estos ocho años.

Desde el punto de vista estructural, la consolidación de la ladera del castillo ha funcionado eficazmente y el problema de la zona radicaba exclusivamente en la fragmentación de las fábricas de piedra y en la degradación de los cables, por lo que se ha reactivado el sistema de control de la tensión de los cables y otros elementos de medida y sondeo que entonces resultaron eficaces.

Respecto a la fragmentación de las fábricas, se han dado problemas distintos. Por un lado, las grandes fracturas verticales que parten, normalmente por la mitad, los paños de la torre octogonal y la separan de las murallas colindantes. Por otro, el desplazamiento en dirección perpendicular a la traza de fragmentos de paño que por el empuje de rellenos interiores o por la concentración de cargas sobre la cara exterior, pandean y se abren (ha aparecido fundamentalmente en la base de la torre y del muro) y la pérdida de traba entre el careado de sillares y el relleno de cal del canto del muro, que hace que este deje de trabajar de forma conjunta.

Ante esta situación planteada, el objeto de las intervenciones ha sido garantizar que la torre quede estabilizada y la retirada de los cables sin peligro.

Las acciones ejecutadas en esta obra de emergencia han pasado por la colocación de andamios con protecciones especiales para reactivar los sistemas de control y medida. También se implantó un sistema de apeos generales de la torre, mediante tensores y cosidos, que formarán parte del sistema final de consolidación estructural. Los cosidos perpendiculares sirven para reforzar la solución de apeo donde la viga anular no podía tener continuidad. Se han colocado siete anillos metálicos en el perímetro de la torre, con vigas metálicas entre caras opuestas.

De igual modo, se ha logrado consolidar parciamente la base de la torre mediante taladros e inyecciones y cosidos estáticos puntuales. Una vez apeada toda la fábrica, se han aflojado paulatinamente los cables existentes los cuales se han retirado finalmente.