ASDEN alega contra el PEMA de Garray

La asociación soriana ASDEN ha presentado alegaciones contra el Parque Empresarial del Medio Ambiente (PEMA)de Garray. Un escrito presentado en la Delegación Territorial de la región en la provincia, el pasado 31 de julio y en el que muestran sus reticencias a esta iniciativa de la Junta, toda vez que la Ciudad del Medio Ambiente tomó otro camino y otro nombre.

Según los ecologistas, este proyecto tiene su origen en la urbanización de chalets, edificios institucionales y de servicios, y suelo industrial denominado en su día Ciudad del Medioambiente (CMA) que en su día pudo ser ejecutada "sin que la jurisdicción ordinaria ni los ciudadanos pudiéramos defender el ordenamiento jurídico ni nuestros derechos como ciudadanos", han recordado.

Tras la declaración de inconstitucionalidad del Tribunal Constitucional en diciembre de 2013, todo lo urbanizado y construido está fuera del ordenamiento, "es decir es ilegal" han puntualizado, y el suelo especialmente protegido "vuelve a tener tal naturaleza jurídica, independientemente de las obras y edificaciones existentes".

Unos supuestos que son ignorados por el PEMA, "que sustenta su justificación de declararlo como suelo industrial en función de unas obras ya ejecutadas, y a que cuesta dinero más su derribo que seguir invirtiendo". Esto es, según los ecologistas, un principio antijurídico "que esgrime una administración pública, cuya obligación es cumplir y hacer cumplir la ley, dando con ello mal ejemplo para infracciones urbanísticas cometidas por particulares".

También se han referido a que el nuevo proyecto esgrime "argumentos demagógicos y populistas", apuntando aquí la promoción y creación de riqueza para que "la ilegalidad urbanística prevalezca.

En cuanto a la singularidad del proyecto, en ASDEN ven claro que se trata de "un polígono más, pero alejado de la residencia de los potenciales trabajadores y de las vías de comunicación principales". A ello han sumado que en la provincia hay un exceso de oferta de suelo industrial, lo que supone "una carga para las arcas públicas".

En su defensa a las alegaciones contra el PEMA, los ecologistas han abogado por la biodiversidad del Soto de Garray, que posee "unos valores naturales de primer orden". Eso sí, el estudio de Impacto Ambiental hace referencia únicamente a información a los terrenos externos al proyecto, y para nada nombra lo que había previamente a las obras. "Además", continúan "omite y oculta información ambiental sobre especies protegidas, situadas dentro de los terrenos urbanizables que posee la propia Junta"

Sobre el Proyecto de la Ciudad del Medioambiente, han insistido en que mostraba "grandes mentiras y contradicciones" sobre la inundabilidad de los terrenos, y donde no se reconocía "ni la realidad constatada ni los rigurosos estudios realizados por la Confederación hidrográfica del Duero, que ha permanecido callada durante siete años. Por ello, han incidido en que el PEMA reconoce que lo urbanizado por la CMA es inundable, pero considera que es una afección "compatible".

"El proyecto vuelve a adolecer de las mismas deficiencias, omisiones y errores que no deberían ser tolerados en el procedimiento de tramitación administrativa, en especial cuando en tal tramitación debe aparecer la firma de técnicos y funcionarios que ahora no estarán protegidos por el paraguas de la Ley de la CMA", han concluido.