Podemos, contraria a una adjudicación de Defensa a Israel frente a una empresa de Palencia

La formación Podemos ha denunciado este martes que el Ministerio de Defensa haya adjudicado un contrato por 60 millones de euros para aprovisionar de munición al Ejército Español a una empresa israelí frente a la oferta de la fábrica de Palencia que opera la multinacional noruega Nammo, y que da empleo a unos 250 trabajadores de la ciudad castellano y leonesa.

Según los denunciantes, la empresa elegida por el Ministerio, Israel Military Industries (IMI), tiene "un abultado currículo de trato con dictaduras sangrientas y recibe fuertes ayudas de su gobierno que le permiten romper los precios en los concursos internacionales". También han reseñado que España impide la venta de armas a Israel "por tratarse de un país en conflicto". A todo ello han añadido que el ahorro que supone para Defensa el haber optado por un suministrador extranjero "dudoso en sus prácticas empresariales" es de 600.000 euros en diez años, "una cantidad muy inferior a los costes sociales" en el caso en el que cerrase la planta española ya que "tendría que sostener el Estado 200.000 euros anuales más el valor del 3% de la producción".

Para Podemos Castilla y León es "una vergüenza" que Defensa "se haya negado incluso a que Nammo reformule su oferta para igualar la de IMI, más teniendo en cuenta que la empresa noruega, al contrario que la israelí, está sujeta a los controles sobre comercio de armas que establecen tanto la Unión Europea como las leyes españolas". En este sentido, han resaltado en la nueva formación política que los representantes de los trabajadores de la planta palentina han afirmado que "algo les huele mal en esta adjudicación", por lo que Podemos quiere dejar claro que el interés nacional "se ha de basar en criterios mucho más consistentes que un falso ahorro de un 1% en un contrato". Estas fuentes también han añadido que "por encima están las cuestiones éticas, cruciales cuando se trata de armamento; la igualdad de oportunidades en el mercado, ya que IMI recibe fuertes subvenciones de su gobierno; y la defensa de nuestro tejido industrial y de las condiciones de vida de nuestro pueblo".

Así, y para concluir, han incidido en que un Gobierno "con un mínimo compromiso patriótico defiende su país defendiendo a su gente y sus valores éticos". Por todo ello han exigido que se revise esa adjudicación y se apliquen "criterios razonables" para dejar fuera a quienes "no merecen beneficiarse de nuestro gasto público, que ha de revertir siempre en el desarrollo de nuestro país y la defensa de los principios democráticos".