Roban y después reponen la lápida de dos de los exhumados en Barcones

La agrupación Recuerdo y Diginidad (ASRD) denunciaba la desaparición de una lápida que recordaba en el cementerio de Barcones a Pablo Rica Gutiérrez y Mariano González, exhumados de una fosa común hace escasamente un año, tras haber sido fusilados en la Guerra Civil Española.

En la asociación han lamentado que este con este hecho se "vuelve a violar su memoria" y también "se ha buscado hacer daño a sus familias". Estas mismas fuentes han detallado hoy miércoles que el pasado jueves 22 llegaba al teléfono de la ASRD un mensaje enviado por el alcalde de Barcones reseñando tal desaparición.

Tras efectuar diversas llamadas y hablar con el responsable del cementerio, los denunciantes lograban averiguar quién fue la última persona que dispuso de las llaves del recinto antes los hechos, por lo que apuntan a que se trata de "la persona autora del mismo o el cómplice necesario". Igualmente han descartado la posibilidad que el robo se produjera sorteando el muro, por el peso y las dimensiones de la placa en cuestión, que es de granito.

"Esa misma tarde contactamos con la Guardia Civil de Berlanga para que tuvieran conocimiento de los hechos, formulando a la mañana siguiente la denuncia en el puesto de la Guardia Civil de Soria para que fuera enviada a Berlanga", han descrito, explicando que es preciso presentar una autorización de los familiares para poder presentar la denuncia ante la autoridad.

Por ello, han lamentado también que este trámite hizo que la familia de Juan Pablo Rica tuviera conocimiento del hecho, "lo que les ha causado un duro golpe después de esperar tanto tiempo para que sus restos mortales descansaran en un lugar digno y pudieran, como siempre deseó su hija, llevarle unas flores".

Como se recordará, este era el segundo elemento conmemorativo en recuerdo a civiles asesinados por el franquismo que se roba en la provincia de Soria. El pasado 3 de septiembre era denunciado el robo de la placa del monolito de la sierra de la Alcarama en los despoblados de San Pedro Manrique. "Al igual que con los asesinados, ambos recuerdos fueron hechos desaparecer, no rotos". Por ello, en la ASRD descartan que se trate de las mismas personas.

La presión ejercida y la "obviedad" sobre quién pudo participar en la sutración han llevado a que, según supieron en la mañana de ayer, la lápida haya aparecido de nuevo en el lugar donde quedó enclavada en un principio.

El colectivo que encabeza Iván Aparicio, tras confirmarlo con Esteban Ibarra, presidente del Movimiento Contra la Intolerancia, ha calificado el hurto como un "delito de odio y de carácter ideológico". Igualmente han desechado que se tratase un robo por dinero, ya que la losa es de un material mucho más barato que el mármol, mineral que tienen otras lápidas del cementerio.