Conferencia final del proyecto Life byProtVal en Almazán

Esta mañana ha comenzado en Almazán la jornada de cierre del proyecto ‘Life byProtval: Recuperación de proteínas a partir del procesado de subproductos animales’. El proyecto Life, tras algo más de seis años de andadura y un presupuesto de casi un millón y medio de euros, expone sus resultados en la conferencia de clausura de la que será anfitriona la villa adnamantina durante todo el día de hoy.

En palabras de la responsable del proyecto, Mayra Lacruz, de Inescop (Centro Tecnológico del Calzado de Elda, Alicante), organismo coordinador el mismo, estas dinámicas tienen como objetivo la valorización, recuperación y reciclado de proteínas no destinadas a consumo humano para productos de mayo valor añadido. Mediante un proceso de hidrólisis enzimática se son valorizados subproductos de origen animal con los que se consiguen bioestimulantes y agentes bioquímicos. El proceso ha demostrado un importante rendimiento con una recuperación de proteínas superior al 87 %. Este tratamiento es capaz de recuperar más de 100 toneladas de proteínas al año, para después reintroducirlas en la cadena industrial de producción, mejorando así su sostenibilidad.

Entre sus socios, cuenta con EnergyGreen Gas Almazán, que es una planta de valorización de residuos no peligrosos de origen animal para la producción de biogás, fertilizante y biocombustible. Así como Trumpler, industria química que genera productos para la industria del cuero y que busca entre las proteínas animales productos que sustituyan a otras materias primas sintéticas menos sostenibles.

Ha sido la concejala de medio ambiente Teresa Ágreda, la encargada de dar la bienvenida a industriales, investigadores y gestores que forman parte de este proyecto. Bienvenida en la que ha puesto en valor la necesidad de iniciativas de este tipo que permitan utilizar las externalidades de distintos procesos e industrias para generar valor en el marco de la economía circular. Lo cual sin duda es especialmente importante en este territorio, por el tipo de economía local donde los subproductos de sectores como el agrario, forestal y ganadero son perfectamente accesibles. Destaca, además, la sensibilidad del equipo de gobierno del Ayuntamiento que viene trabajando para la implantación y mantenimiento de proyectos innovadores y sostenibles en el ámbito de la bioeconomía y la tan ansiada y compleja circularidad de la misma.