El protocolo se organiza en tres fases principales, que se activarán en función de las previsiones meteorológicas y la situación en las carreteras,
El delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, ha presidido hoy la Comisión de Asistencia en materia de vialidad invernal, celebrada en el Centro de Conservación de Carreteras de León. Durante la sesión, se presentó el Protocolo de Vialidad Invernal 2024-2025, que establece la coordinación de los recursos estatales para hacer frente a las nevadas y otras inclemencias meteorológicas que puedan comprometer la seguridad en las carreteras de la comunidad.
En su intervención, Sen subrayó que las nevadas son el fenómeno meteorológico que más problemas genera para la circulación durante el invierno, destacando la importancia de este protocolo, que facilitará una actuación eficaz y coordinada de todos los agentes implicados: “La seguridad y la movilidad en nuestras carreteras son una prioridad, y este plan es fundamental para prevenir y minimizar los riesgos derivados de las condiciones meteorológicas adversas”.
Esta campaña está diseñada para hacer frente a los problemas que puedan surgir en uno de los territorios más grandes de España y Europa. Castilla y León, con 94.000 kilómetros cuadrados, cuenta con más de 5.600 kilómetros de carreteras, de los cuales 2.400 son autovías y autopistas.
El operativo contará con la implicación de alrededor de 3.000 profesionales del Estado procedentes de varios departamentos y con funciones diversas. Habrá posibilidad de refuerzo, según las circunstancias, gracias a la colaboración de los cerca de 7.000 guardias civiles y los más de 3.000 agentes de la Policía Nacional que operan en Castilla y León. Además, la Unidad Militar de Emergencias (UME), con base en la provincia de León, está preparada con un contingente inicial de 500 efectivos del Quinto Batallón, y puede recibir apoyo de hasta 3.000 miembros adicionales de otras unidades de la UME en España.
Maquinaria por provincias
En Castilla y León habrá disponibles 335 quitanieves de empuje, 12 quitanieves dinámicas, 158 quitanieves distribuidoras de salmuera y un total de 347 elementos de maquinaria específica. En Soria serán 48 las máquinas en el operativo, que se detalla a continuación por provincias:
El protocolo de vialidad invernal se organiza en tres fases principales, que se activan en función de las previsiones meteorológicas y la situación en las carreteras:
Fase de alerta: Se inicia cuando la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) emite un aviso de nivel rojo o naranja por nevadas, o un aviso de nivel amarillo que afecte a poblaciones de más de 20.000 habitantes. En esta fase, al igual que en el resto, el delegado o subdelegado del Gobierno coordina las previsiones necesarias, incluyendo la movilización de quitanieves y esparcidores de sal, y la Guardia Civil de Tráfico se despliega para garantizar la seguridad en las vías afectadas.
Fase de preemergencia: Se activa cuando la intensidad de la nevada amenaza con dificultar seriamente la circulación, o cuando la acumulación de nieve, hielo u otras condiciones adversas complican el tránsito en la Red de Carreteras del Estado. En esta etapa, se establece el Comité Ejecutivo de forma permanente, y se despliegan los medios de emergencia, incluyendo la posible solicitud de la intervención de la Unidad Militar de Emergencias (UME) habiéndose constituido previamente el CECOPI. Se implementan restricciones de tráfico en coordinación con la DGT.
Fase de emergencia: Se declara cuando es necesario atender a personas bloqueadas en sus vehículos y prestarles asistencia directa. El Comité Ejecutivo se reúne de inmediato, y se disponen los medios necesarios para garantizar la seguridad y el bienestar de los afectados, incluyendo evacuaciones y provisión de albergue si es necesario. Las actuaciones de los quitanieves y demás recursos, como solicitud de la UME y refuerzo de agentes la Guardia Civil, se intensifican para facilitar el rescate y restablecer la circulación.
Al finalizar esta comisión, tras el desglose de datos técnicos, Nicanor Sen ha hecho hincapié en la estrecha colaboración con la Junta de Castilla y León, los ayuntamientos, las diputaciones provinciales y las comunidades autónomas limítrofes: “Este es un esfuerzo conjunto en el que todos sumamos para garantizar la seguridad vial de nuestros ciudadanos”. Del mismo modo, ha recordado, una vez más, el valor de la estrecha coordinación con todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.