El Foro de la Profesión Veterinaria de Castilla y León, integrado por los Colegios profesionales, Sindicato y Universidad, ha entregado a la Consejería de Sanidad y a los partidos políticos el documento con los ‘imprescindibles’ para garantizar un mejor Sistema de Salud, especialmente en materia de Salud Pública.
Los veterinarios de Castilla y León han entregado su ‘hoja de ruta’ para avanzar en el diseño de las reformas de la Sanidad en la Comunidad. Así lo han confirmado desde el Foro de la Profesión Veterinaria en Castilla y León, organismo integrado por Colegios profesionales, Sindicato y Universidad, y que forma parte del grupo de expertos que aportará propuestas para la reforma sanitaria en la Comunidad. Este amplio documento ya está en manos de la Consejería de Sanidad y de los grupos políticos e incluye una serie de ‘imprescindibles’ para garantizar una mejora del Sistema de Salud, especialmente en materia de Salud Pública.
El documento, firmado por el presidente de Foro y presidente del Consejo de Colegios Veterinarios de Castilla y León, Luciano Díez, apuesta por mejorar sustancialmente la cartera de servicios de Salud Pública, integrar en el Sistema de Salud todas las actividades de control veterinario oficial, mejorar la Red de Vigilancia Epidemiológica de Castilla y León, registrar como Centros Sanitarios aquellos lugares de trabajo donde se desarrollan funciones veterinarias, el desarrollo efectivo del Registro autonómico de Profesionales Sanitarios, el desarrollo y estructuración de las demarcaciones sanitarias, así como la constitución de unos equipos de Salud Pública perfectamente incardinados en los equipos de Atención Primaria de las Zonas Básicas de Salud que integren las demarcaciones.
Luciano Díez insiste en que cualquier reforma sanitaria debe respetar el principio ‘One Health’, Un Solo Mundo, Una Sola Salud. “Cualquier factor que incida en la salud animal o en el medio ambiente repercute directa o indirectamente en la salud humana”, señalan en el documento.
Tras recordar que es necesario superar “la vieja distinción entre atención sanitaria individual y salud pública colectiva”, los veterinarios reclaman incrementar la inversión en políticas de Salud Pública, así como diseñar un nuevo modelo de seguridad alimentaria y de prevención y control de zoonosis. También apuestan por desarrollar un Plan Regional frente a las resistencias microbianas, una de las mayores amenazas para la Salud Pública en este siglo.
El Foro de la Profesión Veterinaria incorpora a la ‘hoja de ruta’ una serie de conclusiones que permitan trazar el camino correcto hacia la reforma sanitaria:
Los veterinarios de Castilla y León recuerdan a Sanidad que “la primera y más importante de las lecciones que tenemos que aprender de este virus emergente es que hay que mejorar sustancialmente el servicio de Salud Pública o Preventivo y el Socio-Sanitario, sin olvidar lógicamente el asistencial primario y hospitalario”. La mejor forma de solucionar un problema, recuerdan, “es evitarlo”.
“Nos olvidamos y menospreciamos a los virus”
La ‘hoja de ruta’ elaborada por los veterinarios no está exenta de críticas a la gestión de la actual crisis sanitaria y recomendaciones para el futuro. Según Foro, en el origen de la pandemia hay varias “evidencias”: “Se trata de un virus de origen animal. Con certeza incubado en el murciélago, mutado en otro animal intermedio y con destino final: el ser humano. Se trata por tanto de una zoonosis, como lo son alrededor de un 60 % del conjunto de las enfermedades infecciosas humanas”.
Los coronavirus, recuerdan, “con más de 550 especies conocidas, y solo 7 de ellas humanas, tienen una alta variabilidad genética con una tasa de recombinación muy elevada, lo que les convierte en serios candidatos, no sólo para que esta pandemia sea impredecible en su comportamiento epidemiológico, patogenia y duración, sino también para que otros coronavirus causen otra catástrofe similar”.
A este respecto, los veterinarios recuerdan que en 2005 se elaboró un Plan Nacional contra la gripe aviar, pero “dada su escasa expansión, rápidamente nos olvidamos y menospreciamos a los virus. No se realizó, como hicieron en Alemania en 2012, un simulacro de epidemia global por coronavirus que les permitió valorar las carencias del sistema y elaborar un eficaz plan de contingencia. En España, por el contrario, el SARS-CoV-2 nos ha pillado a todos por sorpresa y desprevenidos. Se ha fracasado en los criterios básicos de contención de una epidemia: diagnóstico precoz, control de movimientos desde el inicio de la infección, logística y medidas de bioseguridad adecuadas y alta preparación técnica”, concluyen.