Medinaceli vuelve a "ser feliz" con el Toro Jubilo

La noche del sábado 15 de noviembre devolvió a Medinaceli una de sus señas de identidad más profundas. A pesar de las lluvias, cientos de vecinos y visitantes se dieron cita en la Plaza Mayor para celebrar el Toro Jubilo, un rito ancestral que ha regresado al calendario festivo tras la suspensión cautelar que impidió su celebración en 2024. El ambiente en la localidad fue de una contenida alegría y, sobre todo, de reivindicación de un patrimonio que consideran propio e irrenunciable. La celebración, que comenzó a las 23:30 horas, se desarrolló con normalidad y sin incidentes, en un clima de respeto tanto por la tradición como por las opiniones contrarias.

Para los habitantes de la villa, la noche de ayer supuso mucho más que un festejo. Fue la confirmación de la continuidad de una herencia cultural que, aseguran, lucharán por preservar para las futuras generaciones, con la vista puesta en su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) como principal objetivo.

Una fortuna que esperamos no perder"

El sentir mayoritario entre los medinenses es de orgullo y defensa de su tradición. Lejos de buscar la confrontación, abogan por el "respeto mutuo", pero se muestran firmes en la protección de lo que consideran una parte fundamental de su historia. "Es una fortuna poder vivir algo así, una tradición que nuestros abuelos y sus abuelos ya celebraban. Esperamos que jamás se deje de hacer", explica uno de los vecinos. La suspensión del año anterior ha calado hondo en la comunidad, reforzando el deseo de blindar el festejo de forma definitiva. "Para nosotros es un orgullo y lo defendemos. Ojalá lo declaren Bien de Interés Cultural pronto para que quede protegido para siempre y no tengamos que vivir con esta incertidumbre cada año", comenta otro asistente desde la plaza.

Respecto a la protesta antitaurina que tuvo lugar horas antes, organizada por PACMA, los vecinos muestran una postura conciliadora pero clara: "No compartimos el mensaje de quienes protestan, pero no queremos ningún tipo de enfrentamiento. Solo pedimos respeto por lo nuestro, igual que nosotros respetamos otras opiniones".

Gregorio Miguel Santander: "Hemos recuperado la felicidad"

El alcalde de Medinaceli, Gregorio Miguel Santander, ha valorado muy positivamente el desarrollo del evento. "La cosa estuvo bastante bien, no hubo que lamentar ningún tipo de incidente", ha afirmado, destacando la gran afluencia de público "para el tiempo que hizo". El primer edil ha explicado que el toro tardó algo más de lo habitual en entrar al corral, un hecho previsto por la organización: "Veníamos sin mansos y contábamos con ello".

Para él, la celebración de este año ha sido crucial para garantizar la pervivencia del rito. "No se ha perdido ninguna tradición. Si hubieran sido más años de suspensión, la gente se desvincula y las cosas corren el riesgo de desaparecer", ha señalado. El alcalde ha contrapuesto la tristeza del año pasado con el sentimiento actual: "El año pasado fue un día muy triste, pero este año hemos recuperado la felicidad. Que te suspendan un festejo que siempre hemos defendido que es legal no le sienta bien a nadie". En este sentido, ha querido agradecer "a los vecinos de la localidad el comportamiento ejemplar que tuvieron el año pasado" y ha asegurado que "vamos a luchar por que se celebren en años posteriores".

Respeto a la protesta y la vista puesta en el futuro

Sobre la concentración autorizada en contra del festejo, el alcalde se ha mostrado respetuoso: "Me parece correcto que protesten, no a todos nos tiene que gustar lo mismo". Sin embargo, ha matizado la diferencia entre la protesta legal y los intentos de obstaculizar el evento. "Lo que me parece mal es que intenten boicotearlo. Ayer, alguno lo intentó, pero afortunadamente no pasó nada", ha declarado.

La principal aspiración del Ayuntamiento y de los vecinos es conseguir la declaración BIC para el Toro Jubilo, una figura de protección que evitaría la controversia anual. "Esperamos poder poner pronto el caparazón de la declaración BIC, que nos supondrá no tener estos problemas cada año", ha explicado, reseñando que "el animal, a diferencia de otros festejos taurinos, no muere"

Finalmente, el alcalde ha lamentado que Medinaceli se haya convertido en el foco de las críticas: "Me molesta que siempre vengan a Medinaceli. En otros muchos sitios de España se hacen festejos taurinos, pero parece que nosotros estamos en el centro de todo".